martes, 29 de noviembre de 2011

La vida crece en los matices.

Dicen que los suspiros son el aire que te sobra, cuando te falta alguien al lado. Eso dicen. Son una alivio para el corazón, un: párate a pensar, un: no te vayas de mi visa. Un ruego de atención, una espina clavada por amor, una sonrisa que atisba en las comisuras de tu corazón. Son sentimientos, son pensamientos, son recuerdos que suenan a despedida, besos con sabor, caricias que rozan la pasión, son notas de una melodía  que una vez siguieron el ritmo de tu corazón.


















Los suspiros... dicen que son el aire que regalas, la llamada a la esperanza, las búsqueda de un nuevo color. Llenan, te vacían, cambian las notas en tu interior. 
Yo te invito a que te pierdas en el camino de la desilusión,  para que veas, para que sientas, el peligro de un error. Miles de caminos te llevarán ahí, pero tú, tú y todo lo que eres te sacará de ese lugar, donde cuanto te encuentras, significa, que estás un poco más cerca de la felicidad.
Y cuando la boca te sepa a una amarga decepción, sube las escaleras del edificio más alto de Nueva York. Colócate frente a la más bella puesta de sol y repite, grita después de mí: "SOY LIBRE".

... y después suspira. Que los suspiros van al aire y si el viento se los lleva, yo te oiré suspirar. Y suspiraré contigo, porque da igual cuán feliz sea, ahora mismo me falta el tiempo que pasé contigo, me faltas tú... tú y tus suspiros.

martes, 22 de noviembre de 2011

Queda prohibido estar tantos días sin vernos.

Hoy volví al sitio en el que te vi por primera vez. Buscaba las sensaciones perdidas, las palabras olvidadas, las promesas que ya no valen nada. Quizás algún día tú también me busques, puede que yo ya no esté allí o puede que siempre te espere. No soy la única culpable, ambos lo echamos todo a perder. Las palabras ya no significan  nada... no entiendo porque has tenido que irte tan lejos, yo te seguiría echando de menos igual. Ahora solo busco una mirada que me llene, que me tiendas la mano, que te des la vuelta para mirarme, perderme en tu sonrisa, una caricia, saborear tus besos, que me erice el bello, que me recuerdes, un susurro, que quieras cinco minutos, busco un milagro, un golpe de suerte, una máquina del tiempo que me lleve de nuevo a tu lado o un por intentarlo no se pierde nada...

lunes, 21 de noviembre de 2011

No sé para que me mientes, con tu amor es suficiente.

Creces, experimentas, aprendes, crees que saber cómo funcionan las cosas, estás convencido de haber encontrado la clave que te permitirá entender y enfrentarse a todo. Pero después, cuando menos te lo esperas, cuando el equilibrio parece perfecto, cuando crees haber dado todas las respuestas o, al menos, la mayor parte de ellas, surge una nueva adivinanza. Y no sabes qué responder. Te pilla por sorpresa. Lo único que consigues entender es que el amor no te pertenece, que el amor es ese mágico momento en que dos personas deciden a la vez vivir, saborear a fondo las cosas, soñando, cantando en el alma, sintiéndose ligeras y únicas. Sin posibilidades de razonar demasiado. Hasta que ambas lo deseen. Hasta que una de las dos se marche. Y no habrá manera, hechos o palabras que puedan hacer entrar en razón al otro. Porque el amor no responde a razones.

jueves, 17 de noviembre de 2011

Sabes mejor que nadie lo mucho que te quiero.17.CINCO♥

No se cómo, ni cuándo, ni cuanto me enamoré de ti, porque no hay metros cúbicos ni litros para medir todo esto. Porque el amor, es cuando no respiras, cuando es absurdo, cuando echas de menos, cuando es bonito aunque este desafinado, cuando es locura..
Si pudiera elegir, elegiría morir en una carcajada tuya. Elegiría ser las pilas del contabilizador de tus latidos. Elegiría ser tus guantes, para coserme con tus manos y no soltarlas nunca. Y pudiendo elegir, elijo ser sólo contigo y ser tuya a través de palabras en miradas y de miradas en palabras.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Estamos destinados a ser felices.

Dicen que las despedidas siempre son dolorosas, pero encima si son anunciadas lo son aún más.
No me refiero a cuando alguien se va, si no a cuando tú ves que se está yendo.
Cuando tú ves que ya no es lo mismo y que poco a poco las distancias se hacen enormes incluso estando a su lado. Día tras día vas viendo que ya no es igual que era, las frases dejan de surgir espontaneas, se fuerzan las expresiones y llega el día que ya no te queda nada por decir.
Normalmente siempre hay un punto de inflexión, un punto en el que te das cuenta de que no es lo que esperabas o habías soñado. Un punto en el que poner las cartas sobre la mesa, ya no hay nadie para jugar la partida. Ese punto es el principio del fin.
Tú sabes que es el fin y te empeñas en que no lo sea, pero es inevitable. Va pasando el tiempo e intentas seguir igual pero a cada día que pasa te vas dando cuenta de que ya jamás volverá a ser lo mismo. Intentas ser como siempre, pero ya no es igual. Ya no compartes, solo cuentas. Ya no sientes, solo vegetas.Ya no disfrutas, solo pasas el tiempo.
Al fin llega el tiempo que definitivamente la distancia se hace insalvable. Llega el momento de la separación. Por el motivo que sea, por la excusa que sea, se rompe todo, no hace falta un motivo sonado, cualquier tontería es valida y entonces es cuando te planteas de nuevo todo lo sucedido y entonces es cuando te planteas de nuevo todo lo que ha pasado.
Analizas todos lo sucedido, te comes la cabeza con lo que podías haber hecho y no hiciste o con lo que tendrías que haber hecho. Siente rabia por no haber tenido una oportunidad antes de llegar a esa situación o por haberla aprovechado. Pero por mucho que te comes la cabeza ya ves que no hay solución y aunque la hubiera te das cuenta de que la magia ha desaparecido. Se perdió el encanto. Es entonces cuando entras en la situación que yo digo de "conocidos". Hola y adiós, y poco más.
Y como cualquier película al terminar aparece el título "FIN", no lo ves, pero sabes que ha salido y esta fijo en la pantalla. Y entonces es cuando recoges los trastos, te arreglas el vestido, levantas la cabeza, miras al frente, sonríes, y caminado con la cabeza bien alta piensas. VOY A SER FELIZ, LO PROMETO.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Al fin y al cabo.

Alguien me dijo una vez que hay que perdonar, pero nunca olvidar, que quien una vez te la jugó, cien mil veces más lo podrá hacer; y que el hecho de que tu seas de una forma no implica que los demás se comporten como tu lo harías. Alguien me recordó hace algún tiempo, que últimamente la honestidad se vende muy cara, las amistades son casi imposibles, y en cambio la falsedad la regalan, las mentiras es una dosis diaria para sobrevivir, y el desconfiar un hecho actual. Los besos se esconden con un egoísmo interno, y para encontrar a alguien real tienes que armarte de paciencia y valor. Los te quiero se abrigan con sentimiento de culpabilidad, y los siempre y nunca más, llevan inscritos en letra pequeña: "Girate que te clavaré el puñal". Esto me hizo reflexionar caer en una enorme incertidumbre , irrealidad, de que valía realmente la pena, y hoy nadie me dice nada, nadie me recuerda, yo misma me doy cuenta de quien da un beso verdadero, quien se merece mi honestidad y quien posee transparencia, hoy me doy cuenta que no es difícil escoger lo bueno, lo real, de lo que simplemente falso. Cada persona se labra su campo y recoge lo que siembra.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Hay razones para creer en un mundo mejor.



Por cada tanque que se fabrica en el mundo, se fabrican 131 peluches.
Por cada bolsa de valores que se desploma, hay 10 versiones de "What a wonderful world"
Por cada persona corrupta, hay 8000 donantes de sangre.
Por cada muro que existe, se ponen 2000 felpudos de "Bienvenido".
Mientras un científico diseña una nueva arma, hay un millón de mamas haciendo pasteles de chocolate.
El el mundo se imprime mas dinero de Monopoly que de verdad.
Hay más videos divertido en internet, que malas noticias en todo el mundo.
Amor tiene mas resultados que miedo.
Por cada persona que dice que todo va a estar peor, hay 100 parejas buscando un hijo.
Por cada arma que se vende en el mundo, veinte mil personas comparten una coca-cola.

No hay nada como sentir que se ha perdido algo para echarlo de menos.

Es duro fracasar en algo, pero es mucho peor vivir con la certeza de no haber tenido ni siquiera el valor suficiente como para intentarlo.

Hay veces, justo cuando más lo necesitas, que no hay nada. No hay nada en la televisión, no hay nadie con quién poder hablar, no hay música que escuchar porque todas y casa una de las canciones te recuerdan a él, no hay nada que leer, no hay vecinos a los que espiar y no puedes ahogar tu pena y rabia en comida porque... porque no. No es sábado y no puedes irte de fiesta y bailar hasta que salga el sol; y tampoco son horas porque suele ser bien entrada a noche, cuando estamos en nuestra cama tendidos, agotados, pero sin poder dormir, cuando todos nuestros pensamientos, nuestros problemas, ínfimas cosas en las que no habíamos parado a pensar en todo el día... pero no puedes. Y ésta es una de esas que, justo cuando más lo necesitas no hay nada. Te tienes ti, y antes una mala noticia como la recibida ese día y sin nada más que te consuele o que distraiga, no tienes nada más que una palabras en tu mente, breves, pero intensas, que, al fin y al cabo, son mejor que nada.

JB :)

viernes, 11 de noviembre de 2011

Querido destino.

He perdonado errores casi imperdonables, he intentado sustituir personas insustituibles y olvidar otras inolvidables. He hecho cosas por impulso. Me he decepcionado con personas que nunca había pensado decepcionarme, pero también he decepcionado a otras. He dado abrazos para proteger a alguien del mundo. Me he reído cuando no podía más. He hecho amigos eternos. He amado y he sido amada pero también he sido rechazada, he sido amada y no he amado. He gritado y saltado de felicidad. He vivido de amor y he hecho juras eternas, me he caído muchas veces. He llorado escuchando alguna canción y también viendo fotos. He llamado a alguien sólo para escuchar su voz, me he enamorado de alguna sonrisa. He pensado que me iba a morir de tanto echar de menos y no lo he hecho. He tenido miedo de perder a alguien que creía conocer, lo he perdido y no me ha importado. Pero de todas formas gracias, al menos aún respiro.
Firmado, una soñadora a jornada completa.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Never say never. JB♥
























I thought you always be mine, mine.




Everyday I bring the sun around, I sweep away the clouds. Smile for me, I just need somebody to love .















As long as you're with me baby, with the strength of our love, we can go nowhere but up.

































Whenever you knock me down, i will not stay on the ground.





















If you need me I'll come running rom a thousand miles away, cause when you smile I smile :)


























I will never say never, I will fight till forever. Whenever you knock me down, I will not stay on the ground.




martes, 8 de noviembre de 2011

Si pudiera ir donde estas, coger tu mano y echar a volvar, te diría que te quiero sin piedad.

Olvidemos todo lo que nos hemos dicho alguna vez, hagamos como si todo hubiera sido un dulce error, antes de que se estropeen hasta los recuerdos. Todo lo que soy, todo lo que he sido alguna vez, ya no está aquí, y no sé donde he ido a parar.
Me tumbaría aquí mismo y me olvidaría del mundo, Dejar de preocuparse, dejar de pensar, dejarse llevar... Sólo me apetece perder el tiempo intento encontrar de nuevo nuestra luna, esa que nos espió en aquellas noches llenas de sonrisas... Pero yo me dejo llevar, enamorarnos de nuevo será fácil, sólo hace falta que el DJ ponga nuestra canción mientras nuestras miradas se cruzan, mientras nos besamos con las palabras y nos acariciamos con la distancia.
Es difícil sobrevivir sólo con una sonrisa. Buscar la razón para ser feliz cada día. Piensa que  mañana puede pasar cualquier cosa.
Respira bien hondo y déjate sorprender por la vida y sus oportunidades, ¿quién sabe dónde estarás dentro de una horas? En la cima de una montaña, nadando para alcanzar el horizonte, cruzando una mirada que te llene, saltando alto intentado alcanzar el cielo...























Creo que estás muy equivocado, sólo estoy tumbada en el jardín, espiando a las rosas, sustituyendo el olor de tu piel por el frescor del césped, no espero que tú vengas aquí conmigo y te tumbes a mi lado. Pero, si estuvieras aquí, ¿lo harías? Podríamos pasarnos horas hablando, me gustaría saber cuáles son tus esperanzas, cuáles son tus sueños, y que me lleves al sitio donde los guardas. Y poder hacerte sonreir como nadie convirtiendo uno de tus sueños en realidad, y que sustituyas otro de ellos por el deseo de estar conmigo.


















No espero nada, sólo estoy perdiendo el tiempo… Dejé de buscar tu mirada perdida entre la gente hace ya tiempo, cuando supe que no te habías perdido, sólo te habías olvidado de este sentimiento antes lleno de esperanza. Y ahora mi mirada está abierta a cualquiera… cualquiera puede convertirse en alguien. Alguien puede entrar de lleno en mi vida, y ocupar mi corazón. No sé lo es que es el amor, no sé lo que es la vida, estoy dejando que el amor me encuentre, estoy dejando que la vida me llene. 

Casa segundo que pasa es único, irrepetible pero, a veces, tan lleno de soledad...
¿Alguna vez has sentido que lo único que importa es el siguiente momento de adrenalina? Acabas buscando algo que no termina de existir, la eterna felicidad, sin darte cuenta de que hay un espacio que se queda vacío cuando el amor se va.
Qué fácil es perder a alguien, con qué facilidad se nos escapa de las manos, con qué facilidad el corazón queda destrozado, y que difícil no sentir que el corazón se te escapa cuando lo qué más quieres se marcha. Puedes empeñarte en agarrarlo, sujetarlo con todas tus fuerzas pero, si se tiene que ir, se irá. Y el corazón queda destrozado..




jueves, 3 de noviembre de 2011

Cuéntame al oído donde duermen hoy tus miedos.

Tengo pánico a los baches, a los altibajos. A las crisis. Les temo a la soledad y a las matemáticas de la vida. Tengo miedo a los horarios, a la vida estructurada y planificada. Una embriagadora rutina o un monótono día a día. Temo al chocolate negro pero no soy ni mucho menos racista. Temo a quien se esconde bajo su paraguas pero no a la lluvia. Le tengo miedo al abrupto mar pero no a la costa. Tengo miedo a las profundidades de cualquier superficie. Tengo miedo a lo desconocido, pero me despierta curiosidad. Una bochornosa mezcla de sensaciones, en realidad, lo supera todo. Tengo pánico a las distancias, y aún más a las despedidas. Temo las discusiones, las rupturas. Las heridas mal curadas y la falta de remedios. Soy precavida y prudente hasta la exageración, y me asusta lo que eso me consume. Siempre tengo un segundo plan. Me da miedo nuestra generación y su futuro. Tengo miedo de no ser feliz. De ser una más del montón. De no llegar a lo que aspiro, aunque eso a menudo lo olvide. Me asusta el poder de las palabras, pues descubrí que también pueden ser puñales. Temo lo sospechoso, los secretos. Pero amo los susurros, las confesiones al oído, las complicidades y los guiños. No temo las lagrimas, pero si los sollozos. Te temo. Temo tu fugacidad y a la vez tu espera. Temo tu pensamiento, tus planes, tus jugadas. Porque me superas tanto que no llegas a comprenderme. Incluso tanto que me comprendes demasiado. Adoro tu sencillez pero me asusta tu complejidad. Me asusta el paso del tiempo, el desaprovechamiento de este. Temo las letras pero las amo. Temo las artes pero me fascinan. Les tengo miedo a los genios, a los que poseen un don. Pero los envidio. Me asusta el no poder comprenderles. Temo las dobles direcciones, pero me gustan por partida doble. Temo los recuerdos, pero formo parte de ellos. Tengo miedo de las falsas apariencias, pero soy una de ellas. No me asusta la muerte, pero si el día en que deje de lado mis miedos...